cual truhán vendiendo aire chino en Japón y flores nacidas en trenes urbanos
miraré mis ojos desde adentro y diré adiós al ser viejo y con locura
como si el cielo realmente fuera azul y la sangre realmente fuese roja.
Vestirme de circo a blanco y negro, a falta de dinero
llevaré papelitos de colores en cubetas frías
y repasaré la niñez de nuestros abuelos dividida
entre segundas guerras mundiales en Cartago
y primeras guerras civiles en Halifax, con salsa Lizano.
Si mi mundo no es mundo, si no hay mundos que soñar
mi desayuno no es un desayuno sin nada que desayunar
y soy lo que sigue desde ayer y estoy enganchado de un amor
si mi amor no es amor sin nada que amar en la mar,
y mi mar no es la mar aunque la vida sea mas sabrosa; Allí.
Correré detrás de nubes que alcancé la semana tras anterior a la próxima
con el pelo largo una bandera de un país que no se a fundado desde hace dos horas
preguntaré por que eres tan mía como unos tacones con barro pegado
y un vaso lleno de polvo estelar mordido por los cronopios que no son los de Cortázar.
Te regalo té junto con unos lentes oscuros para la noche de sol impaciente
y mañanas sin ti. - ¡Mujer! Con ojos cerrados de gato neo-nato sirio y siamés.
Y unas mulas que no son pardas ya, por que no sé que es esto que traigo en la mano
no sé sobre que hablo y no sé hago mientras mis mulas, tuyas te piden perdón
por qué lo único sé es que no sé nada, además de plagiar.
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