diciembre 27, 2008

Vendo avellanas.

Vendo avellanas
valen un par de ojos
del mismo color
sin luz, no de retrato.

Unos ojos que vistan raro
que sacien las noches estrelladas
y se ensucien las manos, con leche de cabra
salten cercas y muevan piel con agujas.

Necesito un par de ojos
ni verdes,
ni negros,
ni azules,
los cambio por avellanas
por un galón de sangre maltrecha
por un ematoma amarillo
y una huella dactilar hinchada de agua.
267 huesos, 1800 calorías diarias
un millón de sueños otomanos
sobre vampiros y delicadas nueces
todo por un par de ojos; Avellanas
¡Avellanas, avellanas!