seré siempre aquella servilleta arremangada en la tertulia
seré siempre
el pensamiento antes de dormir para siempre
del moribundo amor
del mundo loco
del mundo cruel
y adiós te diré
siempre siendo un fiel curador de tu arte
y de arte
llenarte los ojos por que siempre seré
el deseo de cantos de perdigónes lisos
seré el creador de versos buenos
y de aventuras tristes
de arrullos simples
para decirte buenas noches
y ser siempre tu angel de los sueños.